Javier Moliner, presidente de la Diputación espera con ello zanjar un problema que afecta a ciudadanos y turistas. La Diputación financiará el plan con casi un millón de euros.

Castellón va a utilizar la última tecnología para luchar contra los mosquitos. Todo lo que se ha hecho hasta el momento parece no funcionar y el problema se agudiza conforme se acercan los meses de verano, sobre todo en la zona literal, donde ya hay problemas con los vecinos y con el sector turístico.

Para solucionarlo, la Diputación de Castellón contará con 40 efectivos terrestres y aéreos, entre ellos, 3 helicópteros y 18 drones. Una medida con una inversión de un millón de euros que se utilizarán durante todo el año.

El uso de los helicópteros se supedita a que los ayuntamientos tengan una autorización previa de la Conselleria de Sanidad para fumigar desde el aire si la plaga es un problema de salud pública.

Javier Moliner se reunió en Nules con los técnicos responsables del Servicio Provincial contra los Mosquitos. «Llevamos mucho tiempo hablando del problema de los mosquitos, en el que ha habido una evidente dejadez de competencias por parte de otras administraciones».

Moliner ha querido responder a la preocupación y para ello «la Diputación dio un paso adelante y buscó los medios más potentes, los mejores recursos y empresas para poder dar la solución al problema en toda su dimensión».

Noé García Mújica, gerente de la empresa Lokímica, y adjudicataria del contrato, ha destacado el dispositivo. «Somos conscientes de que la naturaleza nos pone difíciles los retos, pero también de que a base de medios técnicos y recursos podemos atacar esa dificultad. Estamos en condiciones de planificar que en los próximos años la situación que puede vivir nuestro territorio en torno a la problemática de los mosquitos pueda cambiar radicalmente», ha comentado Moliner.

También se ha recordado la colaboración con los ayuntamientos, que tienen la competencia de tratar las plagas, y con la Conselleria de Sanidad. Además, ha recordado que propuso a Ximo Puig, presidente de la Generalitat en 2015, la necesidad de articular un plan provincial y se han llevado a cabo campañas de prevención.

La Generalitat, a través de la Conselleria de Sanidad, activó ayudas contra el mosquito tigre pero estas fueron inútiles debido a que el montante era de 400.000 euros, 50.000 menos que en años anteriores.

Por ahora, es la Conselleria de Medio Ambiente la que trabaja en un proyecto piloto, financiado con 800.000 euros, para acabar con el mosquito tigre a través del lanzamiento de machos estériles en la Vilavella.

Fuente: ElPeriódicoMediterráneo.